• Ejercicio 1
Mirarse frente al espejo y tratar de “hacer espacio” en la zona de la cavidad bucal. Una imagen que sirve de referencia es cuando vamos al médico y nos baja la lengua con un abatelenguas para auscultar nuestras amígdalas. La punta de la lengua en este caso debe permanecer al calce de los dientes incisivos inferiores, apenas tocándolos, mientras tratamos de bajar la lengua por la parte posterior, en donde se curva para bajar a la garganta, de modo que se amplíe el hueco lo más posible.
• Ejercicio 2
Evocar un bostezo (puede ser también frente al espejo), como cuando tenemos mucho sueño y ganas de ir a la cama. Entonces notaremos que el velo del paladar se eleva ligeramente.
• Ejercicio 3
Combinar los ejercicios 1 y 2 simultáneamente. En este punto cabe aclarar que quizá lleve un poco de tiempo dominar estas acciones internas, puesto que una cosa es la sensación que supuestamente estamos evocando y otra puede ser lo que realmente sucede, es por ello que recomendamos la observación de esa zona frente al espejo.
• Ejercicio 4
Emitir una “a” larga con el ejercicio de apoyo descrito antes con las letras “s” y “d”. Si seguimos frente al espejo notaremos al emitir la letra “a” que la acción de apoyo de la voz ayuda a elevar el velo del paladar otro poco. Si es así y podemos ver un hueco bastante amplio significa que vamos por buen camino.
10 ene 2008
Ejercicios para abrir la cavidad bucal.
Etiquetas: APRENDE A CANTAR